Las mascotas son cada vez una parte más importante de nuestras vidas, y ya no son considerados solamente animales de compañía, sino parte integral de cada familia.
Por ello, cada vez son más las personas que consideran a sus mascotas a la hora de viajar.
Dependiendo del tipo de viaje que hagas, la mejor opción es buscarles un cuidador que los atienda mientras tú no estás, pues considera que llevar contigo a tu lomito o tu michi te impedirá realizar buena parte de las actividades turísticas en tu destino.
Pero hay viajes de descanso, donde la compañía de tu mascota es perfectamente posible, sobre todo considerando que cada vez hay más lugares como hoteles o restaurantes que te permiten llevar a tu compañero animal.
En ese caso, llega la pregunta de cómo llevar contigo a tu mascota.
Viajar con ellas en avión es posible, dependiendo de la aerolínea que elijas, y siempre siguiendo los reglamentos que cada una de ellas establece para estos casos.
Lo primero que hay que apuntar es que en general estas reglas aplican solo para perros y gatos, siendo los animales de compañía más comunes y los que menos problemas tienen para hacer un vuelo.
Dentro de estos, hay dos que se distinguen del resto de las mascotas, y son aquellos considerados como de servicio o de apoyo emocional.
Un animal de servicio son aquellos que están entrenados para obedecer instrucciones y que son requeridos para apoyar a alguna persona con discapacidad, como los lazarillos de los invidentes.
Mientras que los de apoyo emocional son ocupados por una persona como parte de un tratamiento médico para tratar problemas como fobias, ansiedado o depresión.
Si no estás en estos casos, también puedes llevar a tu mascota, tomando en cuenta que esto implica un coste adicional.
Por ejemplo, en Volaris hay un costo de $1,750 por documentar a tu mascota, y de entre $1,650 y $1,900 para llevarla a bordo contigo.
Los costos en Aeroméxico son de entre $1,350 y $1,700, dependiendo de si tu vuelo es en temporada alta o baja.
La posibilidad de que te acompañe en la cabina, depende de su tamaño, pues para que te den la posibilidad, su contenedor debe caber debajo del asiento frente a ti.
Estas medidas son de “máximo 44 cm de largo, 30 cm de ancho y 19 cm de alto”, de acuerdo a la información que da la aerolínea, y puede ser de tela, plástico rígido o burbuja.
Además, debe estar totalmente cerrado y permitir que tu mascota tenga movilidad dentro del mismo.
Si esto no se da, entonces debe ser documentada y viajará con el equipaje, aunque para que esto sea posible, su peso máximo, incluyendo el de su contenedor debe ser de 45 kilogramos.
Si tu animal excede estas medidas, no te será posible viajar con él, a menos que lo envíes a través de un servicio de carga aérea, con lo cual tendrías que estar al pendiente de su llegada en un vuelo separado del tuyo y hacer los trámites para recogerlo.
Una sugerencia adicional es comprar una transportadora especial reforzada para que tu mascota vaya segura en el área de carga.
De acuerdo a las especificaciones de la IATA, estas transportadoras tienen una única puerta de metal reforzado con seguro para evitar que se abra por accidente. Tienen un piso a prueba de fugas para evitar que se escape la orina y una adecuada ventilación con aperturas pequeñas para evitar que tu mascota se lastime al sacar el hocico o las patas.
Una cosa más que debes considerar en tu viaje, es la protección de tu mascota, pues siendo como otro miembro de la familia, se debe velar por ellos como por cualquier otro.
Por ello un seguro de viaje es algo que debes considerar para tu travesía.
Con el Seguro de Viaje Travel Protection ofrecido por American Express estás cubierto hasta por 15 eventualidades que pueden afectar tu viaje.
Por ejemplo, si te faltó un trámite o alguna situación te impide abordar con tu mascota, puedes obtener un reembolso de tus gastos.
Del mismo modo quedas protegido en caso de sufrir robo o extravío de tus documentos, un aspecto que también afecta el viaje de tus mascotas, que llevan su propia documentación.
Aunque en general todos los perros y gatos pueden viajar, hay excepciones.
Las razas braquicéfalas no son recomendadas, pues por su anatomía pueden sufrir afectaciones e incluso fallecer durante el vuelo. En caso de que te permitan llevar a un peludo de estas especies, tendrás que firmar una carta responsiva declarando que conoces el riesgo para tu mascota y exhimiendo a la aerolínea si algo le pasa.
Los perros de este tipo son las razas affenpinscher, american Staffordshire terrier, Boston terrier, boxer, bulldog, cane corso, chow chow, dogo de Burdeos, grifón de Bruselas, lhasa apso, mastín, pequinés, pit bull, presa canario, pug, shar pei, shih tzu, spaniel japonés o chin, spaniel tibetano, Staffordshire terrier y toy spaniel inglés.
En el caso de los gatos se trata de los burmés, exotic shorthair, himalayo y persa.
Tampoco se te permitirá viajar con razas de perro consideradas peligrosas o agresivas como lo son los akita inu, dóberman, fila brasileño, pastor belga malinois, pastor de Anatolia, rottweiller y tosa japonés.
Si bien Volaris y Viva solo te permiten perros y gatos, Aeroméxico te abre la puerta a llevar también gallos.
Magnicharters no permite volar con ningún tipo de mascota.
Un último aspecto que debes considerar a la hora de viajar con mascotas es el destino al que los lleves.
En general, no se les permite acompañarte en vuelos de más de 6 horas de duración, y hay destinos que, por proteger la biodiversidad, no permiten que ingreses con mascotas, como es el caso de Holbox.
Asimismo, si vas a viajar al extranjero, debes revisar las leyes de cada país, pues hay diferentes requisitos sanitarios que debes cubrir en caso de que tu peludo te acompañe.
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